Lamentablemente esta actividad sigue desarrollándose más allá de estos operativos y pescadores deportivos que trabajan como guías de pesca (con devolución) y pescadores artesanales de la región, ven con desesperación, como estos irresponsables están arrasando con todo tipo de ejemplares, poniendo así en riesgo la reproducción normal de los peces y arriesgando el futuro de la fauna ictícola del río Uruguay.
Según señalaron se trata generalmente de pescadores con importantes embarcaciones y enormes redes que llegan a la zona conocida como Bajo Uruguay, procedentes desde Gualeguaychú, Paranacito y hasta del Uruguay, arrasando con todo tipo de ejemplares y especies.
“Esto es muy grave y necesitamos que se tomen las medidas más rigurosas posibles para terminar con esta actividad ilegal que atenta contra el patrimonio de todos. Nosotros los pescadores deportivos y los guías de pesca con devolución, vemos con mucha preocupación, importancia y desesperación lo que estos individuos hacen para su beneficio económico, sin importantes nada el daño que generan y que seguramente veremos en un futuro muy próximo, si quienes tienen que cuidarnos no intervienen”, dijo el pescador, guía de pesca a
03442.
Según señalaron ya fueron a la Prefectura y están tratando de llegar a las de la CARU, así como a la prensa para que esto sea público cuanto antes.
“Necesitamos que esto se vea y todos sepan lo que hacen estos sujetos. No queremos pelar por pelear. Pensamos en el futuro y en ese futuro están nuestro hijos y nietos que van a heredar un río muerto por culpa de estos depredadores y por quienes no hacen nada por evitarlo. Estos pescadores operan con r
ed de arrastre con la modalidad lance y no es la forma de pesca de los pescadores artesanales que cada día notan más y más la falta de peces ya que con esas redes sacan todo. Son sujetos que trabajan con ecosondas y buscan los cardúmenes, por lo que literalmente arrasan lo que venga”, agregó el hombre de río, quien pidió mantener su anonimato por el momento y hasta tanto estén plenamente organizados.
De acuerdo a lo averiguado por
03442, estos cargamentos de pescados sacados en aguas del lado argentino, son en su mayoría llevados y vendidos en el Uruguay a un valor de 750 dólares la tonelada con escama.
Esta situación lleva a la unión de los pescadores artesanales y deportivos de la región que preocupados por lo que está ocurriendo están organizando su reclamo, asegurando que estos individuos instalan sus campamentos de manera sorpresiva y escapan con los cargamentos, operando con elementos prohibidos en aguas argentinas.
Autor: Pablo Bianchi
Fuente:
03442 Noticias